“Puedes llorar porque se ha ido o puedes sonreír porque ha vivido;
puedes cerrar los ojos y rezar para que vuelva
o puedes abrirlos y ver todo lo que ha dejado;
tu corazón puede estar vacío porque no la puedes ver
o puede estar lleno del amor que compartisteis.
Puedes llorar, cerrar tu mente, sentir el vacío o dar la espalda
o puedes hacer lo que a ella le gustaría: sonreír, abrir los ojos, amar y seguir”
(Anónimo Escocés)

03 marzo 2008

Más recuerdos


Este fin de semana Santi y yo hemos colaborado con el V Rally Costa Brava Històrics 2008. Santi ya hacía años que deseaba ir y este año ha tenido la ocasión, arrastrándome a mi de paso. Nuestra misión era colocarnos en un punto estratégico del tramo a recorrer por los pilotos y cronometrar los tiempos. Para Santi que disfruta conduciendo y a mi que me gusta viajar en coche ha sido la oportunidad perfecta para recordar lugares en los que ya habíamos estado con Anna .

Vic ha sido uno de ellos. Una de nuestras visitas obligadas cada diciembre, desde que Anna tenía 4 años, era el Mercat Medieval de Vic. Íbamos con Teresa, Jordi y Jordi hijo. Acostumbrábamos a llegar sobre las diez de la mañana, y directamente a desayunar. Recuerdo a Jordi pequeño buscando en la carta si había bocadillo de tortilla de patatas, y a Anna haciéndose la remolona para comer. Después, vuelta por el mercado apretujados entre la gente, subir a los niños en los burritos, comprar pan, coca, chocolate... A comer a casa de Teresa y Jordi y toda la tarde los niños jugando. Fueron seis años haciendo prácticamente lo mismo.

Ripoll fue otro de los lugares por los que pasamos. En febrero del 2006 fue la última vez que Anna pisó la nieve. Subimos a Valter 2000 y de regreso, después de haber comido en Camprodón, paramos en Ripoll, precisamente para ver la salida del Rally al que hemos ido este año. Recuerdo muy bien que entramos en un supermercado y Anna se compro una bolsita de "pelotazos" y un refresco de naranja. Al abrir la bolsa de cualquier manera (eso lo heredó de mi), la mitad del contenido cayó desparramado. Hasta hace poco aún salía alguna bola de estas por el coche.

Regresando al tema de la nieve, en enero de 2001 Anna se puso por primera vez los esquis. Hubiera sido una buena esquiadora porque mantenía el equilibrio y no tenía nada de miedo. Pensamos apuntarla en la escuela de esqui al año siguiente, a pesar de que ni a Santi ni a mi nos va este deporte. Pero todo se truncó en octubre de ese año cuando nos advirtieron que, sobre todo, nada de deportes de riesgo. Aún así, solíamos ir un par de veces cada año y se deslizaba con el trineo, con mucha precaución y vigilada constantemente. Es imposible conseguir que una niña dinámica y atrevida pase, de la noche a la mañana, a ser espectadora de la vida sin poder participar en ella. La dejábamos hacer, siempre con el corazón encogido y muy pendiente de ella, pero sin agobiarla.


4 Vuestros comentarios:

mercé dijo...

" Em costa imaginar-te absent per sempre.Tants de records de tu se m´acumulen,que ni deixen espai a la tristesa,i et visc intensament sense tenir-te ".Miquel Martí Pol.

Que bé que ens ho pasabem,i quan t´ha agradaben les atraccions...t´enrecordes com ens vam posar d´aigua als troncs?..t´enviem un peto molt fort

Natxo Rovira dijo...

Què potents són els records. L'Anni els viu com un tresor, són energia per viure i per haver viscut.
En canvi, a mi, em provoquen una terrible enrorança perquè em recorden que el David, almenys en aquesta vida, ja no hi serà.
He llegit aquests records, els vostres, tan entranyables. No puc sentir el que sentiu vosaltres en recordar-los, però sé com és reviure el propis.
En fi, compartir sempre ajuda, no creieu?
Una abraçada

PS: per cert, cada vegada podem comrpovar la quantitat de gustos similars que teníen (tenen) el David i l'Anna, no? Segur que ara en parlen, ens miren i riuen...

Jo mateixa dijo...

No se si tengo derecho a estar aqui y escribir, pues no puedo ni imaginar de lejos lo que pasais a pesar de haber sufrido yo también una pérdida (soy tia de David) pero que ni de lejos se parece a la vuestra.
Solo quiero mandaros desde aquí mi ánimo y mi energía y todo el amor que se puede dar incluso a gente que no se conoce pero con la que se comparten cosas.
Como me dijeron una vez. Es el amor y no el tiempo lo que cura las heridas. Por eso os mando todo mi amor. Porque es inagotable el amor entre almas.
Y por cierto, me encanta el anónimo escocés que sirve de cabecera del blog. Es increible.
Saludos.

Lorena.

Rosa Mari y Santi dijo...

Hola Lorena
gracias por tu visita y por tus palabras. Los recuerdos de mi hija son lo más valioso para mi y necesitaba compartirlos.
Te esperamos siempre que quieras.
Rosa Mari